martes, 15 de julio de 2014

Casi al final de nuestros días

Casi al  final de nuestros días

En la adolescencia,
Buscamos sin saber que buscamos,
Y en la juventud, desechamos todo
Sin remordimiento alguno,
Cuando encontramos la madures,
Nos parece que la vida fue injusta,
Al no recibir lo que merecía.

Esa locura que parece
Tan solo ser una  fantasía,
En ella dejamos lo más importante
De nuestros sueños y el anhelo
De querer amar y ser amado.

Casi al  final de nuestros días
Todos pensamos un poco,
Y haciendo un recuento
En la memoria de todo lo que tenia,
 Miramos con tristeza
Que llevamos en el  alma un nudo,
¡Y muchas líneas vacías!
Del  cuaderno de nuestra vida.

Quedando en nuestra alma inquieta
Esa eterna melancolía,
y la angustiosa soledad de la vejez,
Quedando con el recuerdo
De esos rostros grotescos
Que opacan la melancolía
Y se vuelve tan cruel la realidad
Que solo quedo esperando.
Que llegue  pronto el día de mi partida.

Autora: Maricela G. Cerón


DE MIL MANERAS

DE MIL MANERAS


Te lo dije en mis poemas,
En los más fervientes que escribía
Noche y día para ti,
No importa que fueran
Las frases más elocuentes,
Tu amor, yo nunca conseguí.

Toda mi lucha
Por conseguir tú amor fue inútil,
Esta batalla, ¡Contigo la perdí!
Sin importar lo que intenté
De mil maneras diferentes
Nunca será lo suficiente
Para que me miraras como soy.

Que nunca me quisiste
Eso lo se, y aun así
Te amaba con toda el alma
Amarte así, fue mi gran error
Y te volviste una obsesión
Que con creces yo pagué.

¡Ayer fuiste mi realidad!
Y ahora que te vuelvo a ver
Ya con mi mente despejada,
He comprendido claramente
Que ese amor tan imprudente
¡Fue mi pecado, y mi salvación!



Maricela G. Cerón